La difícil situación política que enfrenta Venezuela data ya desde algunos años. El chavismo vio su bonanza popular en los programas sociales después del año 2004, sin embargo, con la depreciación del valor del barril de petróleo, la alta inflación y el estancamiento de los salarios comenzó a ver su fin. En ese contexto de crisis económica, Maduro perdió el liderazgo que ejerció Chávez, tanto en la comunidad nacional como internacional, lo que generó una crisis político social de grandes dimensiones. Es por esto, que su discurso se radicaliza a uno de carácter dictatorial represivo y militarizado, que abiertamente no respeta la institucionalidad ni prioriza la convivencia interna del país. Por el contrario, ha generado una crisis económica, política y humanitaria de proporciones escandalosas.
